lunes, 8 de agosto de 2011

CIENAGA DE AYAPEL PARAISO ESCONDIDO DE COLOMBIA


La Ciénaga de Ayapel y otros escenarios acuá­ticos posibilitan la recreación y el descanso. La práctica de la pesca y la caza deportiva, el es­quí acuático, el vuelo de cometa, parapentismo y natación, son algunos de los deportes que se desarrollan en los más de una docena de clu­bes náuticos.

Es sin duda alguna la 'piscina' natural más importante del departamento de Córdoba, con 40 mil hectáreas de extensión, que en la época de verano se reduce a 30 mil, lo que es aprovechado por los propietarios de ganaderías exten­sivas para que pasten allí sus animales y no permitir que pierdan mucho peso,

La Ciénaga de Ayapel le suministra agua al río San Jorge en época de verano, a través del caño Grande o de Sehebe.

La mayoría de los turistas que llegan al muni­cipio de Ayapel provienen principalmente de Antioquia, Caldas y Cundinamarca, sobre todo para las épocas de Semana Santa, Navidad y va­caciones de mitad de año.

El mes de enero es especial, debido a que a orillas de la ciénaga, en las playas de Castillito, se instalan kioscos para que los ayapelenses y visitantes puedan departir y luego bañarse sus cálidas y encantadoras aguas, y disfrutar de momentos de descanso y esparcimiento.

La ciénaga de Ayapel hace parte del macrosistema de humedales y zonas inundables de la
Depresión Momposina y es un sistema de lagunas sobre la llanura aluvial del Río San
Jorge. Cumple una función ambiental importante para la región y el país, pues modera los
regímenes hidrológicos de las áreas tributarias que vierten sus caudales sobre ella, así
mismo, alberga una gran variedad de especies de flora y fauna.

Los sistemas hídricos de la ciénaga de Ayapel, además de su esencia ambiental, tienen un
valor económico ya que sus recursos naturales suministran alimentos y su paisaje es
atractivo para los amantes del turismo ecológico, la pesca, los deportes náuticos y la
natación. Adicionalmente, la historia, las tradiciones culturales y la gastronomía pueden ser
productos turísticos culturales que no han sido explotados aún.

“cuando está llena de agua, es un mar con oleaje bravío
al menor viento En la estación seca se transforma
en una llanura sin la menor sombra El suelo se
cubre de una vegetación menuda, y por entre las
gramíneas brotan vegetales que quizás no se encuentran
en otra parte La pesca y la caza le procuran un
alimento abundante...”